Las leyendas forman parte de lo que la UNESCO denomina Patrimonio Cultural de la Humanidad. En la Convención para la Salvaguarda del Patrimonio Cultural Inmaterial en 2003 se definición tal patrimonio como "los usos, representaciones, expresiones conocimientos y técnicas – junto con los instrumentos, objetos, artefactos y espacios culturales que les son inherentes- que las comunidades, los grupos y en algunos casos lo individuos reconozcan como parte integrante de su patrimonio cultural. Las leyendas son narraciones que suelen prescindir, por lo general, de la historia. Se refieren, eso sí, a personajes que han existido realmente y que protagonizaron hechos sucedidos y hazañas singulares en un determinado lugar. El contenido de estas expresiones respondía siempre a relatos que producían admiración e interés a la gente y revelaban la veneración hacia lo sobrenatural, reflejando, a la vez, acontecimientos históricos que afectan a una comunidad: de aquí s carácter tradicional y la tendencia a fijar el nombre de personas y lugares desconocidos que pueden llegar a ser conocidos a través de ellas. Pero si hay un elemento envuelto en un hálito de misterio es el agua, lo profundo de sus aljibes, la quietud del agua en la oscuridad, las albercas, la presencia en ella de seres sobrenaturales las convierten en uno de los elementos más presentes en nuestra tradición.